El volante Mathias Cardacio hizo noticia por las graves quemaduras que sufrió en sus piernas al intentar prender una estufa durante su cuarentena. El uruguayo fue uno de los tantos mediocampistas extranjeros que llegaron a Colo Colo luego de las dos brillantes etapas de Emerson Pereira. El brasileño es por lejos el mejor exponente extranjero en el puesto en los últimos 25 años de los albos. En 1996 hizo dupla en la contención junto a Marcelo Espina, pese a que el Cabezón en 1995 había llegado para ser el conductor de los albos, puesto que ocupaba en la selección de Argentina. Emerson y Espina jugaban por atrás de Barticciotto y Sierra.
Otro de los pocos que rindió fue el paraguayo José Domingo Salcedo, recordado por trancar hasta con la cabeza. Sin embargo, el paraguayo no fue tanto lo que actuó en el centro del mediocampo, ya que muchas veces fue enviado a la banda izquierda durante sus dos estadías en Macul. Además de Emerson, Espina y Salcedo, otros dos extranjeros hicieron presentaciones un poco más decorosas, haciendo el ida y vuelta desde la zona de contención: el brasileño Marquinhos y el peruano Christopher Gonzales. Eso sí, ninguna de los dos se encasilla en el rol de contención, pese a haber jugado en ese puesto. El brasileño se sentía más cómodo en la creación, mientras que Canchita jugó mucho por la banda izquierda.
A continuación, un listado con los ocho volantes de corte extranjeros que no rindieron en Colo Colo en las últimas tres décadas. El orden lo ponen ustedes.
1 – Pablo Gaglianone: El uruguayo llegó a Colo Colo para suplir la segunda partida de Emerson Pereira en el año 2000. Arribó junto a Juan Carlos Cisneros y Hernán Rodrigo López. En el segundo semestre del 2000 jugó 12 partidos, hizo tres goles y sufrió una expulsión., además de actuar en Copa Mercosur. Era un volante mucho más rústico que el brasileño, que había partido al Corinrthians. Del estilo de Pablo García, pero derecho. Había jugado en el Torino de Italia, pero venía del humilde Deportivo Maldonado de Uruguay. Tras Colo Colo vendría lo mejor de su carrera, llegando a jugar dos veces en Peñarol, Olimpia de Paraguay, Once Caldas, Defensor, Danubio, entre otros.
2 – Osmar Molinas: El Señor Molinas le decían por un anuncio televisivo de esos años. Tenía poca pinta de futbolista, pero había sido capitán de Paraguay en un amistoso ante Chile antes de Sudáfrica 2010. Llegó a Colo Colo en el Clausura 2011 con Américo Gallego, pero luego tuvo a Luis Pérez e Ivo Basay como DT. En ese semestre jugó 14 partidos, registró tres amarillas e hizo un autogol. Lo peor es que fue ante Universidad de Chile en el último minuto de partido en el Estadio Monumental. Era el 2-2 para los azules que lo celebraron como un triunfo. En el Apertura 2012 siguió en el plantel, pero no jugó ningún minuto, siendo relevado a segundo plano por Rafael Caroca, Rodrigo Millar y Horacio Cardozo.
3 – Fernando de la Fuente: De lo mejorcito de esta lista. Llegó el 2011 a O’Higgins desde Chacarita Juniors y en 2012 fue enviado a préstamo a La Serena, en donde fue figura. Colo Colo se tentaría y pediría su préstamo para el Clausura 2012 y Transición 2013. En el primer torneo fue clave para Omar Labruna, con quien jugó 17 partidos. En el Transición 2013 completaría 14 partidos, pero Colo Colo no hizo todos los esfuerzos para comprar su pase a O’Higgins, quien lo mandó el segundo semestre del 2013 a Instituto de Córdoba y el primer semestre del 2014 a Wanderers. Nunca más se sabría de él en Chile. Hoy juega en Sol de Mayo de Viedma de Argentina.
4 . Mathias Cardacio: La razón de esta nota. Cardacio llegó en el primer semestre del 2013 desde el Londrina de Brasil, pero con un currículum que tenía dos equipos de Grecia, el Atlante de México, Banfield de Argentina, Nacional de Uruguay y una estadía en el plantel del Milan de Italia, en tiempos en que el Milan era un gigante de Europa. Llegó el 1 de febrero del 2013, jugó un partido amistoso ante la UC, lo expulsaron y luego lo mandaron a jugar en la filial. El 27 de mayo es despedido sin haber jugado ningún partido oficial por Colo Colo.
5- Fabián Benítez: «Nosotros trabajamos bien en la semana, pero a la hora del partido entramos con miedo» . Esa fue la frase que marcó al paraguayo en su paso por Colo Colo. Su compatriota Gustavo Benítez lo había elegido a él y a Justo Villar para que fueran la base del Nuevo Colo Colo, sin embargo el guaraní se mandó una declaración que no se condecía con su fama de rudo. El ex Audax jugó 10 partidos en ese torneo y partió del club.
6 – Horacio Cardozo: Llegó en el Apertura 2012 con el DT Ivo Basay diciendo que no lo había pedido. Tenía grandes pasos en Estudiantes de La Plata hasta el 2006, pero luego fue cayendo para jugar en Quilmes, Nueva Chicago y dos equipos impronunciables de Grecia. Solo estuvo esos seis meses en Chile, donde jugó ocho partidos, para luego seguir jugando en más equipos impronunciables de Chipre, Grecia e incluso de Argentina (Jorge Newberry y Deportivo Madryn)
7 – Rodrigo Báez: Era la figura de la selección paraguaya en las series sub 15 y sub 17, anotando goles de todo tipo en los sudamericanos que disputó, pese a ser volante defensivo. En 2012, a los 18 años, llegó a Colo Colo como parte de un proyecto de contrataciones de jugadores jóvenes de Chile y Sudamérica. Arribó diciendo que quería la 14 de Millar, pero no fue inscrito en el primer equipo y solo se desempeñó en la filial. Comenzó un ir y venir desde Macul, hasta que en 2016 terminó su vínculo con el club.
8 – Iván Rossi: Llegó a mitad del 2019 para suplir la partida de Esteban Pavez y la lesión de Carlos Carmona. Su parte pertenecía a River Plate, equipo al que había llegado tras ser figura en Banfield, pero donde nunca se pudo afianzar. En Colo Colo arribó como titular, pero jugó solo seis partidos antes del estallido social. Recibió cuatro amarillas y ningún interés por renovar para el 2020. Por lo que más se le recuerda es por el pelotazo para que Esteban Paredes anotara su gol 2015 ante Palestino en La Cisterna.