Un señor “de la colonia” inauguraba hoy su televisor de 50 pulgadas para ver a Palestino en la Copa Libertadores. No había querido hacerlo ante Cerro Largo, pero tras el 5-1 se convenció. Tiene su restaurante en Recoleta, y hoy tenia mucha gente para ser un jueves de febrero. Antes de la TV, ya había contratado el plan de Fox Sports para ver la Copa. El canal, a esta altura canalcito o ex canal, promocionaba toda la Copa Libertadores a través de sus pantallas.
Pero no. La gente mala de Fox no cumplió con su palabra. Vendió algo que no cumplió. El señor “ de la colonia” ni sabe lo que son los redes sociales. Por ahí habían dicho que el partido entre Palestino y Guaraní no iba a ser transmitido por Fox Sports, sino que por la página de Facebook de la Conmebol. El señor “de la colonia” con suerte tiene smartphone y va a tener Facebook. Tampoco Instagram ni Twitter, por donde habían avisado de los cambios en la programación. Mucho menos sabe cómo conectar un computador a un televisor.
Los malos, los de Fox Sports, habían priorizado dar un programa de debate argentino, un partido repetido de la Europa League y una pelea de la WWE en sus tres señales en vez de dar un partido en vivo de la Copa Libertadores, ya en fase decisiva. Lo curioso es que habían dado todos los de la fase anterior. Si era Colo Colo, la U o la UC probablemente no lo hacían. Tampoco si era Olimpia o Cerro Porteño.
Pero la gente mala sigue. Ser de Boca o River en el extranjero es fácil. Pero probablemente esos hinchas son fanáticos de los equipos de su país antes que lo del fútbol argentino. Con Palestino la historia es diferente. Pocos o muchos, los que son de Palestino en el extranjero son solo de Palestino. Por los orígenes, por simpatía, por la lucha. Lo malo es que la transmisión en Facebook, por restricciones de la Conmebol, era solo para habitantes de Sudamérica. Los que están fuera de la Región ni siquiera pueden ver el link a través de la página, y si se los mandan por interno, aparece que este enlace no existe.
¿Y a dónde fue esa gente? A las transmisiones en vivo de youtube. Decenas de opciones ofrecían ver el partido en directo, pero una vez adentro solo se escuchaba el audio o pedían suscripciones, tarjetas de crédito y claves incluido. Gente mala aprovechándose de las decisiones de otra gente mala. Están a la vuelta de la esquina, no se necesita una tele de 50 pulgadas para verla.