En 1994 Miguel Ardiman era uno de los mejores defensores de la liga chilena jugando como central por la derecha en la Católica de Pellegrini. Antes, había sido el lateral derecho de Concepción en la Libertadores 1991. El miércoles 21 de septiembre de 1994 fue el lateral izquierdo de Mirko Jozic en la derrota 2-1 ante Bolivia en el estadio Nacional. El peor partido del croata al frente de la Roja. El inicio del fin del DT al frente de la Roja.
La selección chilena caería por primera vez ante Bolivia jugando en nuestro país. Sería un triste inicio de primavera para el exDT de Colo Colo ante la escuadra de su sucesor en la Roja, Xavier Azkargorta. Dicen los entendidos que aquella noche se dieron los primeros acercamientos para que el Vasco se convirtiera en el DT de Chile desde 1995. A Jozic varios dirigentes ya lo tenían entre ceja y ceja, justamente por planteamientos como el de aquella noche en Ñuñoa.
No solo Ardiman jugó fuera de posición. Wilson Contreras, un ofensivo carrilero derecho de Regional de Atacama, fue el lateral diestro, casi un stopper, ante los bolivianos. Los centrales serían los dos mejores líberos de los 90: Ronald Fuentes y Juan Carlos González. Según palabras del propio Contreras, la organización defensiva de esa noche fue un desastre. “No sabíamos cuándo salir y cuándo no. Un gol es culpa mía por quedarme habilitando porque nadie ordenaba”. La Roja por culpa de dos horrores defensivos.
Por sobre el debutante Wilson Contreras, jugaría Gabriel Mendoza. Por sobre Ardiman lo haría Fabián Guevara. Por sobre Fuentes y el karateka Juan Carlos González estaría Miguel Ramírez. Una locura táctica de Jozic con la carta ofensiva de Regional Atacama jugando como marcador derecho. “No subí en todo el partido. Tenía a Mendoza delante mío. Me sacaron en el entretiempo por Cristián Castañeda”, recordaba Contreras en una entrevista a Don Balón.
Más arriba, Pedro González, delantero de Cobreloa, jugaría de volante, mientras que Marcelo Vega, conductor de Colo Colo, sería delantero. La Roja de Jozic finalmente saltaría a la cancha con Tapia; Contreras, Fuentes, González, Ardiman; Mendoza, Ramírez, Guevara; Pedro González; Vega y Marcelo Salas. Habría cinco cambios, y todos se harían en el entretiempo. Ingresarían Pedro Reyes, Castañeda, Tupper, Tudor y Barrera.
En el segundo tiempo lo de Jozic sería más lógico y jugaría con Tapia; Castañeda, Ardiman, Reyes, Guevara; Mendoza, Ramírez, Tupper; Vega; Tudor y Barrera. Lo curioso, y otra cosa que molestó en la ANFP, es que para esa nómina solo Wilson Contreras y Pedro González representarían a los equipos de provincia. El croata ya estaba provocando mucho ruido. No sólo en los dirigentes, también en el periodismo. Para muchos, los grandes responsables de su partida.
Finalmente la Roja caería 2-1 con goles de William Ramallo a los 27 minutos, empate de Luka Tudor de penal a los 54’, y gol del triunfo de Mario Pinedo a los 80’. Sería triunfo del equipo de Azkargorta, quien había decidido seguir en la selección vecina tras el proceso a EEUU 1994, pero que desde esa noche se le abrirían nuevas oportunidades de trabajo.
Jozic tendría un partido más, ante la Argentina de Marcelo Espina en el Nacional, y a fin de año decidiría partir a sus tierras para estar cerca de su familia en los estragos de la Guerra de Croacia. La Roja le levantaría el DT a los bolivianos, quien nunca consideraría a Wilson Contreras en sus nóminas.
El carrilero reaparecería con Nelson Acosta, dejando grandes sensaciones en los dos partidos ante Argentina rumbo a Francia 98. Carrerones en Buenos Aires y titularidad en Santiago con Marcelo Vega otra vez jugando de delantero junto a Marcelo Salas. Tal como aquella noche del 94 ante Bolivia en Santiago. La primera derrota de la Roja en Santiago ante los altiplánicos. La primera vez de Wilson Contreras, la penúltima de Mirko Jozic.