El Nuevo Fútbol

En el “Nuevo Fútbol” un reportero de cancha brasileño es el encargado de contar los pormenores de un Argentina – Chile. Es parte de TNT y el grupo Turner, el que le compite  a ESPN y el grupo Disney. Son los conglomerados que se instalaron en todos los países para hacer mejores transmisiones en vivo, pero para también para ahorrar recursos y viajes.

El periodista de cancha brasileño hizo entrar a Clemente Montes en Argentina. Antes había reemplazado a De Paul y no a  Nico González. Lo bueno es que en Chile estaba Aldo Schiappacasse para corregir. El que entraba en Argentina no era el chileno Clemente Montes, sino que el arquero Juan Musso. ¿Cómo? ¿En el Nuevo Fútbol pueden jugar dos arqueros? No. El hombre ancla de las transmisiones de TNT también se había equivocado.

Convengamos que la culpa del error no es de la transmisión (?). La culpa es del “Nuevo Fútbol”. El que por pandemia no dejan viajar a transmitir in situ, y obliga (?) a hacerlo desde Chile. La culpa entonces es del “Nuevo Fútbol” por pandemia, el que permite inscribir 28 jugadores y hacer 5 cambios. Dos modificaciones al reglamento por las que probablemente Nahuel Molina Lucero, quien finalmente ingresó, no hubiera tenido minutos en la nueva selección argentina. Por eso no lo conocía ni el brasileño ni Aldo, pese a haber hecho buena campaña en Italia.

En el “Nuevo Fútbol”, el del VAR, los partidos entre Chile – Argentina se definen con pelotas paradas o en repeticiones en cámara lenta. En el “Nuevo Fútbol” (chileno) entramos a cada partido con Argentina con la esperanza de conseguir mínimo un empate. Ni pensarlo antes, donde se celebraban igualdades ratoniles como un triunfo, hasta en amistosos contra algunos seleccionados argentinos incomprobables.

En el “Nuevo Fútbol”, bueno, no tan nuevo, quienes jugaron mundiales juveniles con una selección, pueden jugar oficialmente por otra si es que ya tenían doble nacionalidad antes de tener que elegir la primera vez. Las nacionalidades por residencia entran a revisión de la Fifa. Gracias a ese “Nuevo Fútbol” es que Benjamin Brereton Díaz pudo jugar con la Roja pese a haber disputado un Mundial Sub 21 con Inglaterra, y pese a no hablar ni un ápice de español. En el “Nuevo Fútbol”, un inglés tuvo la oportunidad única de convertirle a Argentina en una competición sudamericana después de toda la rivalidad que existe entre ellos.

En el Nuevo Fútbol chileno, Gary Medel y Arturo Vidal salen a 15 minutos del final en un partido ante la Argentina, con el Mejor Jugador del Mundo en cancha. En el nuevo fútbol chileno no se dan por derrotados después del 0-1. En el “Nuevo Fútbol”, Argentina y Chile están equiparados. Puede pasar cualquier cosa, casi siempre un empate.

En el “Nuevo Fútbol”, el del VAR, el de ingleses jugando contra Argentina en Conmebol, el de los 28 inscritos por torneos, los 5 cambios, los conglomerados que comenzarán a dar torneos por streaming, es que la Generación Dorada se niega a morir. Ni Last Dance, ni Último Baile, ni nada. Tras la Copa América falta un Mundial del “Nuevo Fútbol”. En Qatar 2022, en diciembre y no en junio, con nubes artificiales para capear el calor.  Será el gran mundial del “Nuevo Fútbol” en pandemia, antes de jugar el primer mundial con 48 equipos y tres sedes en 2026. Esas serán las cosas del “Nuevo Nuevo Fútbol”.