BuljubasiChile

El último partido de José María Buljubasich en San Carlos de Apoquindo lo jugó defendiendo al club en el que se retiró: Olimpia de Paraguay. Fue el 25 de enero de 2009, en la emotiva despedida de Universidad Católica al portero, quienes pactaron de mutuo acuerdo una salida consensuada para abrirle paso a Paulo Garcés, pero por sobre todo a Christopher Toselli, quien hace rato pedía cancha tras sus grandes actuaciones en el Mundial Sub 20 de 2007 y el Esperanzas de Toulon de 2008.

Pese a retirarse en Paraguay, el Tati admite que su lugar en el mundo es Chile, Santiago, la Universidad Católica. Amor que comparte solo con Rosario Central. Con los Canallas se acercó poco a poco a nuestro país. Ahí fue dirigido por Vicente Cantatore, quien luego lo pidió para el Tenerife. De regreso en Argentina, fue otro chileno, Manuel Pellegrini, quien lo tuvo como dirigido para ser suplente de Ángel David Comizzo, y aconsejar a un joven tercer portero: Franco Costanzo.

De River salió traumado, errores en partidos clave lo alejaron del club y también del fútbol. Durante algunos meses de 2003 se dedicó a la representación de jugadores, pero en febrero de 2004 fue Salvador Calera, presidente de Unión Española, quien lo convenció de venir a los hispanos para reemplazar a Sergio Vargas. En los Rojos fue figura, e incluso eliminó a los Cruzados en semifinales del Clausura 2004. Para el 2005 ya estaba en la precordillera para jugar por la camiseta de la franja.

A San Carlos y a la UC los conocía de antes. Por Cantatore, por Pellegrini, por Carvallo, su DT en Unión. Ahí también se hizo amigo de Dante Poli, Rodrigo Rios y Sebastián Rozental, con quienes hablaba más de Católica que de los hispanos. En la UC reemplazó a Leonardo Cauterucchi, mientras que Salvador Calera optó por el argentino Nacho González para ocupar el lugar del Tati, otro que venía del retiro, pero con larga experiencia internacional.

Buljubasich ya conocía San Carlos. Era el lugar de entrenamiento que elegía Pellegrini cada vez que vino con River a jugar a Chile. Eso enamoraba al Tati. En los cruzados vivió una nueva eliminación con Unión Española, pero ya estaban listos para ir por el asalto en el Clausura 2005. Ese segundo semestre fue mágico, con la UC campeón ganándole el título a la U, y haciendo gran campaña en la Sudamericana, con el arquero haciendo un tapadón imborrable ante Martín Palermo en La Bombonera. Además, rompió el récord de imbatibilidad con 1352 minutos sin recibir goles. Mucho se ha hablado ya de eso.

El partido más importante se lo ganó al cáncer. Un tumor en la cabeza paralizó su carrera y al fútbol chileno en septiembre de 2006. Afortunadamente era benigno y en octubre ya era dado de alta de su operación. A las pocas semanas se integraba nuevamente a los entrenamientos de la UC para seguir su última etapa en los cruzados hasta fines de 2008. 

Tras una temporada en Olimpia, un 3 de diciembre de 2009, anunciaría su retiro del fútbol profesional. Hoy se cumplen 11 años, uno menos que los años que lleva trabajando como Gerente Deportivo en Universidad Católica, su lugar en el mundo.