Los Juegos Panamericanos de 1995 se hicieron en marzo. Fue en Mar del Plata, Argentina, entre el 12 y el 26 de ese mes. Esa fue la última vez en la que Chile compitió en Fútbol, con las mismas reglas que rigen hoy: un equipo Sub 23 con tres excepciones sobre esa edad. La Roja de Leonardo Véliz se preparó a conciencia, sin embargo ese fracaso, y el del Mundial Sub 20 de Qatar poco tiempo después, terminaron alejando al Pollo de Juan Pinto Durán después de exitosas campañas en la Sub 17 y la Sub 20.
La participación de la Roja Sub 23 en los JJPP de Mar del Plata llegaba en un gran momento. De ese plantel debía salir la base del Preolímpico de 1996, además de otros tantos que sumaría el recién llegado Xavier Azkargorta para la Copa América 1995 y las clasificatorias a Francia 98. También, solo un mes después, se jugaría el Mundial Sub 20 en Qatar. A ese Mundial se había clasificado en enero en el Sudamericano de Bolivia. Los mismos clasificados al Mundial Sub 20 irían a los Panamericanos Sub 23: Argentina, Brasil y Chile.
Leonardo Véliz sabía que en los Panamericanos de marzo no iba a poder contar con Clarence Acuña, figura de O’Higgins, ni con los jugadores de la U, en plena Copa Libertadores de América. En rigor, la única gran pérdida azul era José Marcelo Salas, titularísimo desde 1994. Además del Matador, se debía asumir las ausencias de David Reyes y el zurdo Juan Silva. Finalmente un Juan Silva si iría a Mar del Plata, pero no el de la U, sino que el de Cobreloa. El Chamaco sería el único jugador mayor de 23 años que integraría ese plantel.
La llegada del Juan Silva de Cobreloa se daría de emergencia. Sebastián Rozental, prestado en primera instancia por Universidad Católica, finalmente sería requerido por Manuel Pellegrini para jugar Copa Libertadores. Seba se quedaría en la UC con el puesto que a comienzos de año parecía ser de Marcelo Barticciotto, y terminaría siendo la dupla de Alberto Acosta durante todo el año, salvo cuando el rubio sí debió ir al Mundial Sub 20. Por Rozental se sumaría a última hora el Chamaco Silva, de ya 25 años, y que había estado en la primera nómina de Azkargorta rumbo a Francia 98 a inicios de 1995. En 1994 el jugador de Cobreloa había jugado dos partidos oficiales en la era Mirko Jozic, ante Perú y Argentina en el estadio Nacional.
Lo bueno para Véliz fue que solo Rozental sería negado por los cruzados, mientras que sus compañeros Alex Varas, Dante Poli, Claudio Lizama, Max Muller, Carlos Barraza y Daniel Hormazábal sí serían facilitados. Ninguno de ellos estaba en los planes inmediatos de Pellegrini para ser siquiera suplentes, mucho menos titulares.
Así, con las bajas de Clarence Acuña, Marcelo Salas y Sebastián Rozental, Chile iría con lo mejor que tenía a mano, en un año donde explotaron otros jugadores que más tarde irían al Preolímpico 96, tales como Claudio Núñez o Mario Salinas. El DT Leonardo Véliz regalaría varios años llevando a algunos Sub 20, pero sería en el grupo entre los 20 y los 23 años donde aparecerían algunos nombres pocos recordados.
Los delanteros de la competencia finalmente serían César Díaz de Palestino, Rodrigo Latorre de Cobreloa, Moisés Ávila de O’Higgins, Víctor Mella de Colo Colo y el ya nombrado Daniel Hormazábal de Universidad Católica. La zona de volantes la compondrían Frank Lobos de Colo Colo, Juan Silva de Cobreloa, Freddy Ferragut de los albos, además de los cruzados Barraza y Müller.
En la defensa aparecería una de la grandes sorpresas, el antofagastino David Soto. Lo acompañarían el hispano Ricardo Rojas, el rancagüino Rodrigo Pérez, el colocolino Francisco Rojas, además de los cruzados Poli y Lizama. Los porteros de la competición serían Alex Varas y el evertoniano Carlos Toro.
El nivel en la subsede de Tandil sería bajísimo. La Roja vencería en el debut a la desconocida selección de Bermudas. Sería 1-0 con gol de cabeza de Claudio Lizama, en una de las pocos fotografías que hay de Chile en su participación en Mar del Plata. Luego caería 4-1 ante una más madura Costa Rica, con varios de los jugadores que luego conocimos durante todos los 90 y 2000. Curiosamente, tras la goleada de los ticos, se empataría 1-1 con Brasil y se lograría la clasificación como uno de los mejores terceros. Sería el segundo gol de tiro libre de Frank Lobos. Uno ante Costa Rica y el de la clasificación ante Brasil.
En Cuartos de Final vendría el cachetazo final. El campeón Argentina vencería 1-0 en Mar del Plata. Aquel equipo formó con Carlos Bossio; Javier Zanetti, Roberto Ayala, Jorge Jiménez, Rodolfo Arruabarrena; Diego Cagna, Cristian Bassedas; Ariel Ortega, Marcelo Gallardo; Guillermo Barros Schelloto y Sebastián Rambert. Ese equipo también tenía a Pablo Paz, Juan Pablo Sorín, Roberto Monserrat, Claudio Husain, Hernán Crespo, entre otros. El DT Daniel Passarella había usado ese torneo para amar la base de clasificatorias a Francia 98. De la Roja solo llegaría el Murci Francisco Rojas, y en menor medida Ricardo Rojas.
La participación de Chile se tomó como un fracaso, sobre todo porque antes de partir el DT Leonardo Véliz había dicho que iba por la medalla de oro. La eliminación ante Argentina no dolió tanto como la goleada ante Costa Rica o la poca diferencia que se hizo ante Bermudas. En el resumen, solo Dante Poli y Frank Lobos fueron los jugadores destacados. El dato más potente es que gran parte del plantel nunca más se volvió a poner la Roja en ninguna de las categorías. Fue un torneo fantasma, donde ni muchas fotos se pueden encontrar.
