Desconozco si Nicolás Millán tiene hermanos. Lo cierto es que en los campos de entrenamiento de Stamford Bridge andaba vestido como hijo único, al punto que el mismo Jose Mourinho reparó en lo abrigado de la nueva promesa chilena que probaba suerte en Londres. “¿Por qué anda tan abrigado, si en Chile igual hace frío?”, le decía el portugués cuando lo pillaba dando vueltas por ahí con poleron y parka, y anda a saber con cuánta ropa debajo de eso.
La foto con Shaun Wright Phillips y Ashley Cole así lo demuestra. Abrigado, pero feliz. Hasta parece que ellos le pidieron la foto al chileno, y no el delantero a los seleccionados ingleses y figuras del Chelsea. Es que por esos días Nicolás Millán dio la vuelta al mundo. Él era el famoso. Con 14 años había debutado en Colo Colo en un partido oficial ante Santiago Wanderers en Playa Ancha en 2006. Le había quitado el récord a Carlos Caszely como el jugador más joven en decir presente en el fútbol chileno.
El estatus del niño Millán había cambiado. A las pocas semanas estaba en Londres para probar suerte el el superpoderoso Chelsea de aquellos años. Los ingleses le habían ganado la pulseada al Inter de Milán. Todos querían verlo. El delantero lo hizo bien. Destacó. Mourinho habló de él y casi dio por hecho su fichaje al equipo blue. “Estaba un 99% adentro”, decía Millán. “Parece que al final primó ese 1%”, comentaba después con tristeza.
En épocas de Blanco y Negro recaudando y recaudando, otra vez apuntaron alto y pidieron precio de un jugador consolidado por un niño de 14 años. El Chelsea seguía ofreciendo muy buena plata, pero insuficiente para las pretensiones de los dirigentes albos. El delantero ya hablaba con Mou y planificaban siguientes pasos. «Mourinho no es un tipo arisco, ése es su papel. En los entrenamientos es chistoso y cercano al jugador, no como se ve en la tele”, recordaba Millán.
Otro con el que hizo buenas migas fue con Claude Makelele. El volante venía del Real Madrid y hablaba español. En ese idioma le comentaba lo sorprendido que estaba de que ya hubiera debutado profesionalmente con 14 años, y el gran futuro que le veía. Es que todos pensaban que ya estaba en Inglaterra para quedarse en Europa. No sería así, y al mes volvería a Chile.
El Niño Millán, a su regreso, con Colo Colo sin jugar torneos internacionales y con algunos atacantes recuperados de sus lesiones, ya no estaba en los planes inmediatos del club y debía volver a inferiores. El atacante ya tenía nuevo representante y se plantó por un contrato profesional. En Colo Colo no estuvieron ni cerca de ofrecerle lo que le pidieron al Chelsea. Millán prefirió irse del club algunos meses después de haber debutado, y con su paso por Chelsea entremedio. Argentina y el club Rivadavia serían su destino. Seguía siendo un niño.
Su carrera nunca despegó. Deambuló por equipos de Primera B, Segunda Profesional, e incluso más abajo. Ya tiene 30 años. Al menos este 2021 puede sacar pecho y decir que estuvo en el Mejor Equipo de Europa, el ganador de la Champions League. El equipo donde Kanté heredó todo de Makelele, el francés que fue el amigo de Millán en el Chelsea.