El tercer Superclásico en Rancagua, el mismo día de la quiebra de Colo Colo

23 de enero de 2002. Un año antes que naciera la Copa Gato. Día del primer superclásico del año entre Colo Colo y la U en el marco de la Copa Tarjeta Línea Propia. Día que la jueza Helga Marchant decretó la quiebra de los albos. Algo que se veía venir desde fines de 2001, cuando el 17 de diciembre Jaime Pizarro asumió como entrenador del Cacique bajo las condiciones de armar un plantel de jugadores formados en el club, más piezas clave en algunas zona de la cancha. Se quedaba Héctor Tapia en ofensiva, Marcelo Espina en la conducción, e irían por Joel Reyes y Pedro Jaque, ya cerca de los 40 años. Finalmente solo llegó el volante.

El capitán de ese equipo iba a ser Héctor Tapia, por sobre Espina, por sobre David Henríquez, Raúl Muñoz y Marcelo Barticciotto, quien no estaba contemplado como titular. Tito Tapia estuvo en el superclásico del 23 de enero en Rancagua, y luego el 30 de enero en un amistoso ante 12 de Octubre de Paraguay en el Monumental, el día de las ya míticas poleras “A Morir por el Colo”. Luego el delantero se iría a Palestino por problemas de dinero, para pasar finalmente a mitad de año al Lille de Francia, cuando se reabrió el libro de pases europeos.

Esa noche del miércoles 23 de enero del 2002, con el plantel colocolino recién masticando la quiebra de pocas horas antes, albos y azules salieron a la cancha del viejo estadio El Teniente de Rancagua. El capitán Héctor Tapia lideraba al joven equipo albo. Lobos; Mena, Henríquez, Aceval; Leal, Sergio Fernández, Madrid, Zuñiga; Espina; Tapia y Chamagol González era lo mejor que Pizarro podía poner en cancha. Luego, para el Apertura 2002, Riffo le sacaría el puesto a Aceval, Huaiquipán a Leal, Reyes a Fernández, Muñoz a Zuñiga e Ignacio Quinteros a Tapia.

La U de Víctor Hugo Castañeda salió con Johnny Herrera; Castañeda, Von Schwedler, John Valladares, César Henríquez; Pinto, Chavarría, García; Pardo; Pedro González y Luis Rueda. Fue este último el que abrió el marcador a los 33 minutos, pero luego Héctor Tapia anotaría por duplicado a los 43 y 77 minutos. El Petrolero Mario Cáceres pondría el 3-1 final a los 88’, venciendo a un joven Johnny Herrera, que tuvo uno de sus peores partidos en la U.

Ese día se jugó oficialmente el tercer Superclásico en Rancagua. Luego en 2003 habría otro por Copa Gato, duelo que también ganaría Colo Colo, esta vez con anotación de Juan Pablo Úbeda. Ese solitario gol de Spiderman pondría el 2 a 2 de triunfos albos y azules en la Sexta Región. Ese domingo 26 de septiembre, esta vez en un partido oficial, la U y Colo Colo volverán a enfrentarse en El Teniente. Será la quinta vez, tras un amistoso en 1979 que ganó la U por 3-0 con tantos de Juan Soto y Héctor Hoffens. El segundo sería otra vez para los azules, el 9 de noviembre de 2001, con anotaciones de César Henríquez, Diego Rivarola y Nelson Pinto. Esta será la ocasión para quebrar la historia, esa odiosa palabra que marcó el devenir de Colo Colo un 23 de enero de 2002.